jueves, 31 de julio de 2008

Catarsis - Somos lo que hacemos no lo que decimos ser

Lo más autodestructivo del ser humano es amar...enamorarse de otro ser humano. Somos todos tan imperfectos que esto de querer idealizar a una persona tan llena de defectos, como todos, no puede ser mas que un circulo vicioso de ilusiones y desilusiones dolorosas...y contigo no es la excepción , aun que ya quisiera yo que así fuera...

Toda la vida, contigo es así...sabemos que "no", yo intento un "si", tu dices el "no", pero actúas el "si"...yo termino disculpándome, tu terminas abrazándome y todo sigue confundiéndome...


En fin si fuera un "si" seria todo demasiado bueno para ser verdad y esta cosa de amar, así sin su cuota de sufrimiento, de dolor, no seria lo entretenida que es...


Te sigo amando es cierto, pero ya no estoy enamorado de ti, te explique la diferencia no?, han pasado tantas cosas ,de ida y vuelta, que esta suerte de repetición crónica de nuestros atardeceres del pasado, ni siquiera me causa la misma pena que antes, ni siquiera la misma ilusión ...he llegado a pensar que es ya una cosa mecánica...


Lo Interesante del caso es que en mi vida se ha ido incrementado la cantidad de personajes como tu( ahora son 3), sorprendentes, adorables, a quienes al parecer les paran bordando el cuerpo con hilos de mi ansiedad...de quienes termino enamoradísimo un día y decepcionado completamente al otro( con la carga de sufrimiento y frustración que eso conlleva) y en realidad no es que me arrepienta, creo que en cada uno de los casos, volvería y con mas ganas, a hacer cada cosa que hice por pasión, amor o locura. Es más, en algunos casos, haría incluso un par de cosas más.


El hecho es que aunque no quiero calificar a cada una de estas experiencias como errores, por que no lo son; tampoco quiero que me siga pasando, por que nada me enferma mas que no conseguir el premio mayor y tener que recibir con bombos y platillos, y de buena gana, por esto de la sinceridad y lo bonita que es la amistad, el tan gastado y frustrante premio consuelo.


No es que no valore tu amistad, lo hago créeme, me esmero en entenderte, y creo haber hecho cosas por ti que así nomás nadie hubiera hecho. Pero en realidad también es enfermiza, aun que placentera, esta suerte de amistad con beneficios en la que nos vemos envueltos, en la que no se si me quieres a mi o las cosas que hacemos, o si de pronto es tu amor o pasión oculta la que se manifiesta o es simplemente el efecto del alcohol en tu cuerpo.

El hecho es que siempre terminamos por alejarnos y en el afán este de recuperar la amistad terminamos cayendo en el mismo círculo vicioso del que al parecer no queremos salir.


Entonces he llegado a la conclusión de que nuestra amistad igual va a durar para siempre, por que siempre estaremos ahí, esporádicamente y con largos plazos para que pase el roche, pero estaremos ahí y en consecuencia no sirve de nada hacernos paltas sentimentales, tu dirás "yo nunca me las hice" y yo diré "sí, yo soy el cojudo que se ilusiona" y sí pues yo soy quien sigue en el circulo vicioso, por que de una u otra forma el sufrimiento es menor al placer de sentirte cerca, yo soy el huevón que sabe que jamás lograra lo que quiere contigo, yo soy el huevón que le adjunta a la más sincera amistad una cuota de deseo y de enamoramiento …para, seamos sinceros, aportar lo humanamente imperfecto, equivoco y autodestructivo que le falta a la, naturalmente mediocre amistad entre dos personas que han ido a la cama en mas de una ocasión.


"Somos lo que hacemos, no lo que decimos ser"


Abril - Mayo de 2007

lunes, 28 de julio de 2008

Me llega


Esto ya tiene sus meses...pero esta chevere para el primer post. hope you like it.

Me llegan al pincho Mc Donalds, el sol al mediodia, los virus de computadora y los clubes de fans. Me llega al pincho ir a Wilson. Me llega al pincho que se acabe el desodorante, que se queme el foco y que desaparezca el control remoto. Me llega al pincho resfriarme. Me llegan al pincho el trome, el ajá y como escribe el corresponsal del comercio en Cusco.

Me llega al pincho la gente chismosa, la gente hipócrita y la gente convenida. Me llegan al pincho quienes se aprovechan de la debilidad de otros para satisfacer sus necesidades, curiosidades o simples gustos indeterminados. Me llegan al pincho la huevona que dice “ahí cholita donde la ves” y el huevón que dice “serrano de mierda”. Me llega al pincho la gente que cree que con dinero lo comprara todo, me llega al pincho la gente que lo compra todo y la gente que por tener un polo de marca o 500 canales en la Tv, cree que es más que los demás.

Me llega al pincho la gente extremadamente egoísta, me llega al pincho la gente ridícula, me llega al pincho el huevón que no pone su chancha y la cojuda que siempre se hace pagar el taxi o el pasaje. Me llega al pincho el idiota que pasa con su salsa de mierda a todo volumen en el auto y peor aun si es regueton. Me llegan al pincho los bling bling, el Eminem de breña y el Hector Lavoe de Surquillo.

Me llegan al pincho las flacas que pretenden ganarse el cielo y la tierra con su gran trasero y en ese afán, terminan asesinando su poco probable belleza interior, con todos los disfuerzos propios de una reina de belleza y la naturalidad de un maniquí de Gamarra; y, por supuesto, los patas que en su afán de ser parte de este cielo y esta tierra desatan elaboradísimos planes para hablarles, sacarles el fono o el Messenger y peor aun los patas que dedican su vida a llamar la atención mas que ellas “para estar a su altura pues brother!”. Me llegan al pincho los patas que les sacan el fono. Me llegan al pincho quienes no me dan su fono.

Me llega al pincho la gente que se crea un personaje, que es uno hoy y será otro mañana. Me llega al pincho la gente que se cree más de lo que es; y la que se cree menos, peor. Me llegan al pincho las flacas que dicen ser vírgenes sin serlo, y los patas que alardean de cuantas flacas se han tirado, en que posiciones y bajo que condiciones. Me llegan al pincho las perras. Me llegan al pincho la huevona que me dijo pendejo y el huevón que me dijo puto.

Me llega al pincho el huevón que se pone el audífono blue tooth por las puras huevas, me llega al pincho el huevón que en su borrachera se cree dueño del mundo y manda cerrar locales amparado en algún desconocido articulo de cualquier código que solo el conoce. Me llega al pincho el huevón que se quedo atrapado en 4to de media y, según el, sigue siendo cool.

Me llega al pincho el galancito de barrio, la ricurita de cuadra y la miss barranquito, por que se alucinan Brad's y Angelina's que jamás podrán ser, me llegan al pincho quienes crean estos monstruos y los mantienen en sus altares de bodeguita, cabina de Internet y pichanguita de domingo. Me llega al pincho la corrupción, especialmente la de menores. (Aun que a los 16 ya estas bien grandecita/o para decir si quieres o no)

Me llega al pincho quien no marca posición. Me llega al pincho quien siempre queda bien con todos. Me llegan al pincho Chávez, Bush, Aznar y Toledo, me llega al pincho Animal Planet. Me llega al pincho Martha Hildebrandt o como chucha se escriba, pero por sobre todo me llega al pincho la gente que hace de un equipo de fútbol una ideología por la cual vale la pena morir. Me llega al pincho la U. Me llega al pincho Misterio y toda su delincuencia y las productoras huevonas, que ponen en la TV personajes como este, que a nuestra ya tristemente educada sociedad, solo la exasperan y le plantean roles cojudos, peores que de panelista de Laura Bozzo, o de personaje de reportaje de Día D. Me llega al pincho la gente cojuda que ve a Bayly sin haberlo leído.

Me llegan al RE PINCHO Fujimori, su familia y todos los fujimoristas. Me llega al pincho Ollanta Humala, sus ayayeros, sus viejos y su hermano Antauro. Me llega al pincho el APRA, que atemoriza a los buenos funcionarios que no son “del partido”. Me llega al pincho la gente de canal 7, que transmite los mítines apristas y que por si fuera poco, tienen la concha de no llamarme para prácticas.